Que la chispa y la pasión desaparezcan con el tiempo es algo muy normal. Como ya se sabe, al principio de una relación, estamos con una explosión de endorfinas que nos hace sentir la pasión sin límites y nos mantiene en un estado de euforia pero después de ese periodo llega otro más maduro basado en la ternura y la complicidad. Llega un momento en el que las dos partes tienen claro lo que al otro le gusta y se repite hasta que deja de sorprendente para convertirse en lo normal. Y no solo se trata del sexo. A veces un ramo de rosas o cualquier regalo sencillo despiertan la ilusión de que el otro se haya acordado de ti. Recuperar momentos Intentar repetir situaciones del principio como si fuese un aniversario. Por ejemplo una cena en un restaurante, un viaje, una canción. No esperar Siempre queremos que la pareja adivine nuestras necesidades. Si se quiere algo se debe comunicar de manera abierta y en positivo, por ejemplo “Quiero un abrazo”. Si no decimos las cosas luego no nos podemos molestar porque no ocurran. La empatía no significa ser adivino. Reciprocidad Dar y no recibir crea un sentimiento negativo de abandono. Siempre tienen que existir un ten con ten. No puede tirar uno solo del carro. Cuando se crea este vínculo de apoyo y cariño todo va sobre ruedas. Saber expresar y aceptar las críticas Lo mejor es empezar reforzando los aspectos positivos y en segundo lugar hablar de los negativos, así la otra persona no se cierra en banda. Nunca se debe juzgar sin cariño y sin ganas de superarlo. A veces con las prisas se habla de tonterías y no de lo que realmente sentimos y deseamos. Decir piropos. Siempre es halagador sentirse sexy para el otro, de este modo el apetito sexual aumenta.
Fuente:Consejos para reconquistar a tu pareja/Temas de Belleza