La lectura de la Biblia, te asombrarás de cuánto Dios ha prometido darte y hacer por ti y tu familia, no sólo este nuevo año sino siempre. El promete nunca abandonarte sin importar el giro que den las cosas malas, aun si pasas por una incertidumbre innecesaria y dolorosa. Entre más conozcas Sus promesas, te levantarás con más certeza y sin temor.
Sus promesas son el pilar de tu herencia y del hogar, deja que Dios cuide de ti y tu hogar. Dios nos da Su Palabra como un mentor bondadoso
y cuidadoso que nos protege.
Estamos “encomendados” a la Palabra de Dios ; esto es, se nos motiva a ponernos bajo su custodia y su cuidado benevolente. La Biblia no es una lista de tareas que nos impulsa a hacer la voluntad de Dios. Tampoco nombra Dios a supervisores para asegurarse de que leamos tanto como se supone que deberíamos hacerlo. En vez, Dios nos da Su Palabra como un mentor bondadoso y cuidadoso que nos protege.
Sus Palabras no sólo nos alertan para alcanzar nuestra herencia completa y el gozoverdadero, sino que también nos edifican. Al leer la Biblia, nuestra persona interior, nuestra vida espiritual, se desarrolla y madura como un adolescente que crece con rapidez.
Este nuevo año pídele a Dios que te ayude a confiar en el, promete estudiar su palabra diariamente, pues su palabra aumentan nuestra fuerza y confianza. Su Palabra impulsa nuestro carácter de manera que lleguemos a estar firmemente establecidos en Sus caminos.
Si deseas mejorar las relaciones en tu familia lee las promesas de Dios en la Biblia debido a la capacidad sobrenatural que éstas tienen para cambiar. Tal como la adoración tiene un poder transformador en nuestras vidas, el leer la Biblia lo tiene también.
y cuidadoso que nos protege.
Estamos “encomendados” a la Palabra de Dios ; esto es, se nos motiva a ponernos bajo su custodia y su cuidado benevolente. La Biblia no es una lista de tareas que nos impulsa a hacer la voluntad de Dios. Tampoco nombra Dios a supervisores para asegurarse de que leamos tanto como se supone que deberíamos hacerlo. En vez, Dios nos da Su Palabra como un mentor bondadoso y cuidadoso que nos protege.
Sus Palabras no sólo nos alertan para alcanzar nuestra herencia completa y el gozoverdadero, sino que también nos edifican. Al leer la Biblia, nuestra persona interior, nuestra vida espiritual, se desarrolla y madura como un adolescente que crece con rapidez.
Este nuevo año pídele a Dios que te ayude a confiar en el, promete estudiar su palabra diariamente, pues su palabra aumentan nuestra fuerza y confianza. Su Palabra impulsa nuestro carácter de manera que lleguemos a estar firmemente establecidos en Sus caminos.
Si deseas mejorar las relaciones en tu familia lee las promesas de Dios en la Biblia debido a la capacidad sobrenatural que éstas tienen para cambiar. Tal como la adoración tiene un poder transformador en nuestras vidas, el leer la Biblia lo tiene también.