Es bueno de vez en cuando dejar descansar a nuestro organismo, por lo menos una vez por semana, no consumiendo alimentos, pero sí agua, aunque algunos sostienen que los beneficios se logran con no menos de cuatro días de ayuno. También es opcional el consumo de frutas y/o jugos durante esos ayunos, esto si usted padece problemas de gastritis.
El ayuno es excelente para eliminar las toxinas de nuestro organismo, mejora la circulación sanguínea y promueve la vitalidad y la fuerza corporal, salvo que se padezca de problemas hepáticos, renales o cardíacos, en cuyo caso puede resultar contraproducente.
Durante el ayuno puede que la persona pierda algo de cabello y se le reseque la piel, pero esto volverá a normalizarse una vez terminado el ayuno. Se recomienda no hacer ejercicios y descansar lo más posible durante el ayuno.
Una vez terminado el ayuno los alimentos deben incorporarse muy paulatinamente.
Pueden también practicarse ayunos parciales como beber jugos de frutas, o comer solamente ensaladas.
Hoy vivimos en una sociedad que rinde culto a la comida y la bebida. Hoy la sobrealimentación es un fenómeno universal. La hospitalidad se juzga por la cantidad de comida que se sirve y la salud y la prosperidad por los kilos que pesa la persona.