Si hicieras un análisis de tu vida, te darías cuenta que todo lo que eres aun en las pequeñas cosas has recibido la influencia de alguien mas y es casi seguro que esa persona que influyo en ti ni cuenta se dio de lo sucedido, y esta es tan fuerte que se convierte como en una cadena, todos somos influenciados por otros y así sucesivamente, la pregunta es: tu influencia es buena o mala? si alguien dependiera de ti seria para beneficio de el mismo y de la sociedad?
Pero también se da el caso de personas que son autodependientes, que son originales, que han recibido poca influencia de otros y estas han sido para bien, estos son tan auto dependientes que son admirados por otros y sirven como influencia para los mismos, este tipo de personas deben tener cuidado con su estilo de vida, porque cualquier cosa que ellos realicen puede causar la desdicha o alegría de otros.
Las personas dependientes siempre escogen a alguien, necesitan tener gente a su lado, no pueden lidiar con los espacios, con la toma de responsabilidades, con la libertad. La persona dependiente necesita tener a alguien a su lado para que le digan quién es, logran verse a sí mismos, solamente a través de los ojos del otro. Por eso están pendientes que los demás los refuercen, siempre preguntan si esta bien lo que hacen. Si los demás no señalan su trabajo no logran ver suficiencia.
1. Los dependientes intelectuales, que son aquellos que no se creen con capacidad para resolver, que tienen que estar preguntando ¿Qué tengo que hacer? ¿A dónde tengo que ir? No solamente nos encontramos adultos así; también hay niños que recurren a la dependencia intelectual.
En este tipo de dependencia, la persona llega a creerse que no puede pensar, entonces necesita poner a los otros a pensar por él/ella …. ¿A vos que te parece? ¿Si estuvieras en mi lugar, que harías?…. ¡Qué fácil!
2. Los dependientes afectivos, son aquellos que dependen todo el tiempo que alguien les diga que los quiere, que los ama, que son lindos, que son buenos. Si en algún momento alguna persona responde con una negativa, terminan personalizando la situación y diciéndole al otro que sabe que le dice que no, porque dejó de quererle. Es quien en la relación de pareja se echa a llorar o cae en el reclamo afectivo porque no se dio las gracias por la cena o quien termina haciendo una crisis porque después de una discusión asegura que ya no le quieren.
3. Los dependientes morales, a los cuáles cataloga como los más peligrosos, pues necesitan permanentemente la aprobación del afuera para tomar sus decisiones. Necesita de otro para que le diga si lo que hace esta bien o mal, alguien que todo el tiempo está pendiente de si lo quiere de si lo que quiere hacer corresponde o no corresponde, si es o no lo que el otro o la mayoría harían.